Con las elecciones encima, un sondeo electoral en Pensilvania, uno de los estados más impredecibles.
Para las plazas de gobernador y su segundo, tenemos a Douglas V. Mastriano y Carrie Lewis DelRosso en el tándem republicano. En el demócrata, a Josh Shapiro y a Austin Davis. También hay presencia de otros partidos, por ejemplo, el equipo libertario lo conforman Matt Hackkenburg y Tim McMaster, pero, como ya sabemos, el pollo se lo repartirán los de siempre. Y tiene pinta de que se lo lleven los demócratas. Ahora mismo, el puesto de gobernador está en manos del demócrata Tom Wolf que lleva desde el 2015 en el cargo y su gestión no parece que haya sido muy criticada, lo que, tal vez, dé cierta ventaja a los demócratas. Por otro lado, Mastriano no termina de convencer. Aunque lo respalde una mujer en su drástico plan antiabortista. Parece ser que, incluso en caso de incesto, sería partidario de que la mujer siguiera adelante con el embarazo. Quizás esta propuesta a algunos republicanos pudiera chirriarles. Y eso que es veterano de guerra y devoto de Trump. A esto esto hay que añadir que el cuerpo republicano está volcado en su candidato al Senado, Mehmet Oz, plaza mucho más importante, y a Mastriano no le queda más remedio que apañárselas como pueda.
En el Senado, ¿Oz o Fetterman? Aquí la cosa se complica. Fetterman empezó con buen pie, pero, desde que en mayo le diera esa dolencia cardíaca, los republicanos están haciendo un buen uso, o malo, depende de quién lo mire, claro, del corazón de Fetterman. Otro asunto al que los republicanos están sacando punta es que, según ellos, Fetterman quiere ver a todos los presos en la calle.
Oz tiene muchas tablas delante de las cámaras. Estuvo al frente de un programa televisivo, el Show del Dr. Oz, que luego traspasó a su hija Daphne. (Parece que el programa no fue bien y tuvo que cancelarse). Fetterman se medirá con Oz este martes, y creo que del debate, como buen actor que es, el Doctor saldrá victorioso.
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USDA-ARS Fort Keogh Livestock y Range Research Laboratory. |
Los demócratas, por su parte, empezaron muy bien con los anuncios que criticaban el gusto del doctor Oz por adquirir macmansiones. Por lo visto, el domicilio que el Doctor da por habitual está en Nueva Jersey, pero, de prisa y corriendo, en diciembre del 2021, se compró una en Pensilvania para poder presentarse a las elecciones. Quizás hubiera preferido la Florida, pero ya estaba pedida con Rubio.
Aquí la lista con las impresionantes casas del Doctor, que no creo que esté por la labor de recortar los impuestos a los que malviven y dejar que los multimillionarios tengan que sacrificarse una de sus veinte mil casas. Y mucho menos hacer de monumento andante, como su competidor, que, en los brazos lleva tatuadas fechas que recuerdan a aquellos que murieron de manera violenta en su municipio, Braddcok. Esa ordinariez, no cabe duda, a uno lo afea mucho y, ante las cámaras, hay que lucir palmito y procurar que las mentiras plastificadas de la cara no se nos quemen.