La obra, ambientada en un salón en territorio indio de 1888, nos presenta la vida de Bass Reeves, el primer africanoamericano que fue ayudante del sheriff. Se dice que Reeves hizo más de 3000 arrestos sin recibir un balazo. Algunos creen que sirvió de inspiración para la figura del Llanero Solitario.
Bass Reeves nació esclavo en Arkansas, en la casa de William S. Reeves. En 1846 el señor Reeves y séquito se mudan a Paris, Tejas. Y es en Tejas, durante la Guerra de Secesión, cuando decide que el esclavo acompañe al hijo, George, a combatir en el bando de los confederados. Bass logra escapar a territorio indio, a lo que hoy es Oklahoma. Allí aprende las lenguas y costumbres de los semínolas y los creek. En 1865, con la abolición de la esclavitud, consigue su libertad y regresa a Arkansas donde contrae matrimonio y alimentará a once hijos.
Hombre de moral intachable, incluso le tocó arrestar a uno de sus hijos acusado de asesinar a su esposa, en 1907 tuvo que retirarse porque el estado de Oklahoma se negaba a admitir un funcionario africanoamericano.