Y seguimos de fiesta. Hoy, lunes, es Día de los presidentes aquí. Y mañana es el Martes gordo o Martes de Carnaval.
Una festividad luisiana que acabo de descubrir gracias a Terence Simien es la carrera de Martes de Carnaval. Una celebración de origen francés que probablemente se remonte a tiempos medievales, cuando los pobres que vivían en las zonas rurales se acercaban a los centros urbanos pidiendo por las casas y castillos de los más adinerados algo de comer. Cuando el magnánimo aflojaba la bolsa, el mendigo bailaba y cantaba para pagar su generosidad.
En esta carrera también se suelta un pollo al que hay que dar caza, (puede costar un poco porque muchos participantes están como una cuba), tradición que también se seguía en la Francia medieval. La persecución del animal en algunos sitios se hace a pie, con un capitán o varios, que van a caballo. Las hay más modernas y algunos prefieren ir en furgoneta o en moto. Normalmente a las mujeres no se les ha permitido participar en la persecución del ave, aunque, a finales del siglo pasado, se fue abriendo la mano. En algunas localidades existen grupos compuestos solo por mujeres.
La influencia celta también se deja sentir: la canción, que no la letra, que se entona para el Martes de Carnaval y que se conoce por Canción de Martes de Carnaval se trajo de la Bretaña francesa. También es de origen celta la costumbre de llevar látigos (los americanos suelen estar hechos de tela de arpillera) con los que intimidar al que no quiera soltar la comida. Al final de la carrera, los participantes preparán gumbo (se pronuncia gámbo, una especie de caldereta con ingredientes varios) y compartirán las viandas en un festín comunal.
Fueron los colonos acadienses (también conocidos por cajunes), deportados por los ingleses a mediados del siglo XVIII y que se refugiaron en el sur de Luisiana, los que trajeron consigo su lengua, su música y sus tradiciones, como es el caso de la carrera que nos ocupa. En cuanto a la vestimenta, también van disfrazados con capirotes estilo nazareno o, efectivamente, a lo Ku Klux Klan, (aunque no tienen ninguna relación con este movimiento, ya que el KKK vino después de la Guerra de Secesión y los trajes se venían usando siglos antes), mucho más rudimentarios y no tan tenebrosos. Las máscaras están hechas de tela metálica y los disfraces, muy coloridos, parece que estén hechos de retales, y suelen imitar a animales de pico y pluma.
Y para los que sepan francés o quieran disfrutar de este Martes a ritmo de Carnaval, aquí va una versión de la Canción de Martes de Carnaval.
"Le Chanson de Mardi Gras".
Les Mardi Gras vient de tout partout, tout le tour du moyeu.
Vient une fois par an pour demander la charité.
Une vieille patate, une patate et des gratons.
Les Mardi Gras vient de tout partout, tout le tour du moyeu.
Vient une par an pour demander la charité.
Une vieille patate, une patate et des gratons.
Capitaine, capitaine voyage ton flag, tout le tour du moyeu.
Une fois par an pour demander la charité.
Et des patates, des patates et des gratons.
Les Mardi Gras vient de l’Angleterre, tout le tour du moyeu.
Vient une fois par an pour demander la charité.
Une vieille patate, une patate et des gratons.